Tras casi un año de negociaciones, las partes han alcanzado acuerdos en 16 capítulos de los 22 que componen el convenio colectivo, por lo que USCA confía en alcanzar un acuerdo sobre la totalidad del convenio en los próximos meses.

Asimismo, USCA y Enaire han acordado que durante el proceso de negociación ahora retomado se mantendrá la plena vigencia del laudo arbitral dictado en febrero de 2011 por Manuel Pimentel, que ha constituido desde entonces el II convenio colectivo. De igual forma, ambas partes han decidido aparcar durante el proceso negociador sus diferencias sobre la ultraactividad del vigente convenio.

“USCA acude, de nuevo, a las negociaciones con voluntad constructiva para alcanzar un acuerdo beneficioso para ambas partes” y “espera encontrar el mismo talante en la delegación de Enaire para poder alcanzar un acuerdo global en un plazo breve, que permita alejar cualquier escenario de conflictividad entre Enaire y sus controladores aéreos”, aseveró.

El sindicato ve el acuerdo como una condición “imprescindible” para dotar a la navegación aérea española “de la estabilidad necesaria que permita afrontar el incremento de tráfico previsto para los próximos años”.

En este sentido, recordó la “gran importancia” del sector aéreo para España al suponer un “elemento clave” en el crecimiento económico, ya que más del 80% de los turistas que nos visitan utilizan el avión como medio de transporte.