La mosso, Mónica Fraile Villamor, ha sido condenada a tres años de cárcel e inhabilitación absoluta por plazo de ocho años como responsable de un delito de detención ilegal, según la sentencia hecha pública hoy.

Sus dos compañeros, Alberto Fabregat Díaz y Juan Díaz Fortes, han sido condenados a cuatro años de cárcel y once de inhabilitación por un delito de detención ilegal, otro de atentado contra la integridad moral y una falta de lesiones.

Además, los tres agentes deberán indemnizar a la víctima, Jose Antonio Medina, con un total de 8.220 euros. La Consejería catalana de Interior ha sido declarada responsable civil subsidiaria.

Todas estas penas han sido confirmadas en la sentencia hecha pública hoy por la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, quien ha desestimado los recursos interpuestos contra la resolución de la Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Barcelona, dictada en marzo de 2009.

ROCE EN LA DISCOTECA

Los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 2 de junio, cuando los tres agentes de los Mossos d’Esquadra, quienes se encontraban fuera de servicio, fueron a una conocida discoteca de Barcelona para tomar una copa.

En un momento dado, Fraile Villamor, Fabregat Díaz y Díaz Fortes pasaron junto a Pedro Sáez Argenso y José Antonio Medina, quienes se encontraban con un grupo de amigos en el interior de la discoteca. En el trasiego se produjo un roce entre Sáez Argenso y Fraile Villamallor, quien aseguró que le había tocado el culo.

A raíz de este incidente, Díaz Fortes se encaró con Sáez Argensó y comenzaron a gritarse. Fabregat Díaz se acercó para ayudar a su compañero, un gesto que Medina interpretó como un intento de agresión a su amigo, por lo que agarró al mosso y le hizo caer al suelo.

Los servicios de seguridad de la discoteca intervinieron en la trifulca y expulsaron del establecimiento a los dos grupos. A los pocos minutos llegaron al lugar dos agentes de los Mossos d’Esquadra.

Los agentes implicados en la pelea se identificaron y comunicaron a los dos mossos recién llegados que Medina estaba detenido por atentado contra la autoridad. Díaz Fortes se dirigió al detenido para espetarle un “te vas a cagar”.

Los agentes uniformados procedieron a identificar a Medina, ponerle las esposas e introducirlo en el vehículo policial, sin que presentara resistencia alguna. Una vez en comisaría, Fraile Villamor, Fabregat Díaz y Díaz Fortes se hicieron cargo del arrestado, que fue introducido en una sala de cacheos.

Una vez dentro, Fabregat Díaz y Díaz Fortes comenzaron a pegar a Medina a la vez que le decían que era un “chulito” y “que se iba a cagar”. Al marcharse, los agentes manifestaron al detenido que sabían donde vivía y que “si tenía cojones para denunciarlo lo matarían y se follarían a su mujer”.

Medina sufrió varias lesiones fruto de la agresión de los agentes. Al día siguiente de su arresto, un médico forense le reconoció y certificó que presentaba hematoma peri orbitario izquierdo, algias cervicales y cuadro ansioso.

La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Barcelona absolvió en instancia a Sáez Argensó del delito de abuso sexual del que había sido acusado por la agente de los Mossos d’Esquadra.