En declaraciones a Telecinco recogidas por Servimedia, Fernández Díaz fue preguntado por las informaciones periodísticas que apuntan a que la Policía Nacional de Galicia informó de que unos 50 aficionados de los Riazor Blues iban a viajar a Madrid con motivo del partido contra el equipo rojiblanco.

A este respecto, el ministro desmintió que exista ninguna “información oficial” de la Policía en la que se hable de este viaje a Madrid de los aficionados ultras del equipo coruñés.

No obstante, el responsable de Interior aseguró que la Policía está investigando “todo lo que tiene que ver con lo que sucedió” este domingo antes del partido Atlético-Depor. El ministro dijo que están analizando tanto la información policial que había sobre los movimientos de los ultras como lo ocurrido con la venta de entradas para asistir al partido en el Vicente Calderón.

ASUMIR “RESPONSABILIDADES”

El responsable de Interior añadió que no podía cuestionar que “algo ha fallado” de cara a evitar el enfrentamiento entre los ultras del Atlético y del Depor. Por este motivo, dijo que si detectan que se produjo “alguna negligencia”, se asumirían “las responsabilidades consiguientes”.

Destacó, en este sentido, que la Policía tiene obligación de “prever” cualquier incidente y que hay un “protocolo de seguridad” que será examinado, aunque incidió en que los responsables de lo sucedido son los violentos que provocaron los altercados y el fallecimiento del seguidor deportivista. Al mismo tiempo, que una de las cuestiones que también se están investigando es que pudieron vender entradas al margen del circuito oficial, localidades que habrían ido a parar a los ultras.

En cuanto al hecho de que el equipo rojiblanco haya decidido expulsar a los ultras del Frente Atlético tras lo ocurrido el domingo y que el Depor también haya tomado medidas contra los Riazor Blues, Fernández Díaz dijo que “más vale tarde que nunca” que los clubes tomen medidas de este tipo.

“LISTAS NEGRAS”

El ministro dijo que “ojalá lo hubieran hecho antes” y se quejó de que los equipos “no han sido lo contundente que debían” en el pasado para hacer frente a los seguidores violentos. Al mismo tiempo, el titular de Interior dijo que su departamento está estudiando una serie de medidas para combatir a los ultras en el fútbol.

Entre estas medidas, dijo Fernández Díaz, estarían la elaboración de “listas negras de violentos” a los que no se permita el acceso estadios; que no puedan ocupar determinados lugares en las gradas; o que no se les cedan entradas para ver los partidos.

Otra de las medidas sería que el coordinador de seguridad de los equipos, que es un policía, sea sometido periódicamente a “rotación” para evitar la “excesiva implicación” de estos funcionarios con los clubes.