Según informó este martes la citada fundación, se trata de una iniciativa pionera resultado del compromiso de esta entidad y de la Obra Social la Caixa para promover la integración de las personas con discapacidad y también para fomentar la sensibilización entre el público general hacia la ciudadanía con discapacidad.

Utilizando una novedosa técnica de reproducción denominada Didú, que consigue conferir texturas y un relieve de hasta seis milímetros a imágenes planas, la Fundación María José Jove ha creado cuatro obras para tocar.

De esta forma, indica la entidad, además de disfrutarse a través del sentido de la vista, las obras pueden sentirse también con el tacto y el oído, abriendo la puerta del mundo del arte a personas con discapacidad visual.

La experiencia se completa escuchando simultáneamente la locución de una audioguía, que va dirigiendo y explicando el recorrido táctil de cada obra.