Tráfico. El 46,7% los familiares de muertos en un accidente teme viajar en coche

- Según un estudio de la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes DIA

MADRID
SERVIMEDIA

Casi la mitad de los familiares de fallecidos en un accidente de tráfico (un 46,7%) teme volver a montarse en un coche, autobús, tren o metro después de haber perdido a un ser querido en la carretera, según se desprende del estudio ‘Secuelas Psicosociales en Familiares de Fallecidos por Accidentes de Tráfico en España’, elaborado por la Asociación DIA y hecho público este viernes.

En el estudio han colaborado la Dirección General de Tráfico (DGT) y la Fundación ONCE, y la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes DIA lo ha dado a conocer con motivo del Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico, que se conmemorará este domingo.

El trabajo, basado en encuestas a 150 familias de víctimas con el objetivo de profundizar en las secuelas psicológicas y sociales para mejorar los programas de intervención y contribuir a la recuperación de estas personas, concluye que entre los que han perdido a un ser querido en un siniestro de tráfico hay una elevada presencia de síntomas como la depresión, la ansiedad o la hostilidad.

Así, en cuanto a la ansiedad fóbica, un 46,7% de los familiares aseguran sentir temor de viajar en coche, autobús, metro o tren; el 56,7% evita cosas, lugares o actividades porque le dan miedo; el 57,1% se encuentra nervioso al quedarse solo y uno de cada tres (33,3%) experimenta incomodidad al estar entre mucha gente, como en el cine o ir de tiendas.

Por otro lado, más del 50% de los encuestados ha vivido una u otra sintomatología corpórea desde que su familiar perdió la vida y es común que conflictos psicológicos internos sean expresados como signos físicos.

Así, el 53,3% tiene dolores de cabeza; el 56,7% afirma tener una percepción de nudo en la garganta; el 50% ha sufrido ahogos o dificultad para respirar y un 40% siente entumecimiento u hormigueo en alguna parte del cuerpo.

OBSESIONES

En cuanto a las obsesiones y compulsiones (presencia de conductas, pensamientos e impulsos que la persona considera indeseados, crean una angustia intensa y son difíciles de evitar o eliminar), el 76,7% manifiesta preocupación por la aparición de pensamientos, palabras o ideas no deseadas y que no se van de su mente; el 53,3% tiene dificultades para recordar las cosas; el 61,3% sufre malestar ante la dificultad de tomar decisiones y el 80% se ve con problemas para concentrarse.

Además, muchos familiares de víctimas mortales en la carretera también experimentan sentimientos de timidez, hipersensibilidad a las opiniones ajenas y, en general, incomodidad en las relaciones interpersonales. De hecho, el 69,7% afirma sentirse afectado por la sensación de que los demás no le comprenden o no le hacen caso.

Por otro lado, el estudio abunda en la depresión (con signos y síntomas clínicos como desánimo, desesperanza e ideas autodestructivas), de manera que el 69% afirma sentirse bajo de energía o decaído, el 55% dice sentir malestar por tener ideas de acabar con su vida, un 40% se siente afectado levemente por culparse a sí mismo de todo lo que pasa y el 53,6% asegura tener la sensación de sentirse inútil o no valer nada.

La ansiedad también está presente en este colectivo, hasta el punto de que el 58,1% siente miedo de repente y sin razón, el 70% tiene pensamientos de que va a pasar algo malo y más de la mitad confirma sufrir pensamientos o imágenes estremecedoras o que le dan miedo.

HOSTILIDAD

Por lo que respecta a la hostilidad (presencia de pensamientos, sentimientos y conductas propias de estados de ira, agresividad, irritabilidad, resentimiento y rabia), característica del trastorno por estrés postraumático junto con la depresión y la ansiedad, el 66,7% tiene arrebatos de cólera o ataques de furia que no logra controlar; el 61,3% teme sentir el impulso de pegar, golpear o hacer daño a alguien y un 48,3% está preocupado por gritar o tirar cosas.

Sobre la ideación paranoide (respuesta a un trastorno de la ideación), un 41,9% tiene la sensación de que los demás le miran o hablan mal, y, en cuanto al psicoticismo, el 55,6% se siente solo aunque esté con más gente y el 70% se encuentra distante y sin sensación de intimidad con nadie.

“Todos estos síntomas, especialmente los depresivos, deben ser tratados de manera inmediata y adecuada por profesionales especializados. Desde Asociación DIA consideramos que las víctimas de tráfico y sus familiares no están recibiendo el tratamiento postraumático adecuado’, señaló Francisco Canes, presidente de esta entidad.

Con motivo del Día Mundial en Recuerdo de las Víctimas de Accidentes de Tráfico, Canes consideró “vital” el endurecimiento de las penas, ya que, según añadió, “el Código Penal es demasiado benevolente cuando hablamos de siniestros de tráfico con víctimas mortales”. “Vidas enteras y familias destrozadas por personas que deciden ponerse al volante con copas de más y muchas veces vemos que no entran en prisión. Es intolerable”, concluyó.

(SERVIMEDIA)
14 Nov 2014
MGR/gja