ENTREVISTA
“Necesitamos saber lo que ocurre en materia de discapacidad en los países menos desarrollados porque nos ayuda a tener diferentes perspectivas”
Bob Chamberlin, vicepresidente de Workability International
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Robert Chamberlin es el vicepresidente de Workability International (WI) y ha participado activamente en la conferencia de 2014 de la entidad celebrada en Madrid. Además, es consejero delegado de la agencia de colocación de empleo para personas con discapacidad SourceAmerica, pero su interés y su apoyo a las personas con discapacidad nace en él mucho antes, justo cuando dirigía a más de 41.000 personas encargadas de todo el apoyo logístico para las Fuerzas Armadas de los EEUU. Ya allí, destacó por su apoyo incondicional a los programas para las personas con discapacidad.
¿Qué idea se lleva a EEUU que le haya hecho reflexionar o que merezca la pena poner en práctica?
Todos en WI tenemos un mismo interés: conseguir empleos para las personas con discapacidad en los diferentes países, pero resulta que cada país lo hace de una forma diferente. Personalmente, estoy muy interesado en lo que está ocurriendo en España porque además de incluir laboralmente a las personas con discapacidad buscan que esto sea compatible con el negocio. Y eso es lo que me gustaría hacer a mí en EEUU. También me interesa cómo actúa la administración española porque obliga a la empresa de más de 50 trabajadores a que el 2% de su plantilla tenga discapacidad o bien que contrate servicios realizados por personas con discapacidad.
¿Cuál es el valor de las conferencias anuales que realiza WI?
Todo el mundo trae ideas a WI para que crezcamos con ellas y cada vez más países están interesados en pertenecer a la entidad por el valor que supone lo que se comparte en este tipo de encuentros y en la propia organización.
El representante de Nepal en WI, Ram Prasad Dhungana, se queja de las enormes diferencias que existen a la hora de incluir laboralmente a las personas con discapacidad en países no desarrollados y en países ricos. ¿Es tan ancha la diferencia?
Sí, la diferencia que hay respecto a la creación de empleo para personas con discapacidad en los países desarrollados y lo que no están desarrollados es inmenso. De hecho, en EEUU tenemos grandes empresas que no obtienen beneficios sino que en muchos países, como Bangladés, tienen que sobrevivir individualmente, por ejemplo, comprando una vaca o haciendo incienso. Por tanto, es muy diferente lo que ocurre en estos países, pero es algo que todos nosotros necesitamos saber porque nos ayuda a tener diferentes perspectivas. Porque la misión común aquí es la de crear empleos para las personas con discapacidad, así o con compañías como la que yo mismo presido en Norte América.
¿Cómo vamos a conseguir el equilibrio? ¿Es la cooperación o la solidaridad, compartir lo que funciona en mi país para que otros países consigan lo mismo que yo lo que hará que la brecha que nos separa sea menor?
Tendrá que pasar mucho tiempo hasta que lleguemos a ver esta situación equilibrada. Sin embargo, si no hacemos esto el cambio nunca será posible. Mi motivación personal, dada la situación, es que hay que subir peldaño a peldaño. Se trata de un proceso gradual y no se puede poner una fecha para que ocurra.
Los responsables que están aquí, ¿tienen discapacidad?
No todos. Yo tengo una, pero no le doy importancia porque no me limita de manera alguna. Pero muchos sí tienen discapacidad y los otros, lo que sí tienen, es una enorme compromiso.
¿Cómo se ve o se trata a las personas con problemas de salud mental en EEUU?
Es muy difícil combatir el estigma de las personas con enfermedad mental también en los EEUU. Pero ahora el gobierno está comprometido a incluir el trabajo para las personas con problemas de salud mental como parte de la recuperación. Esto es un paso inmenso para este sector de la sociedad. De hecho, en ‘SourceAmerica’ vamos a trabajar más mano a mano con la entidad nacional de personas con problemas de salud mental.
Por otra parte, en SourceAmerica empleamos alrededor de 45.000 personas con discapacidad y aproximadamente un tercio de las mismas tienen una enfermedad mental grave y/o menos grave. Nosotros les tenemos en cuenta.
(SERVIMEDIA)
08 Nov 2014
BSR/gja