En un comunicado, el Grupo de Trabajo de Aceite de Oliva de Asaja aseguró que la producción este año va a ser “corta” y que la producción va a ser “muy inferior” a la de la campaña anterior, e incluso a la media de producciones de los últimos cinco años, por lo que “difícilmente se superarán las 750.000 toneladas en toda España”.

En la campaña anterior, que Asaja calificó como “desastrosa” a nivel de producción, se cosechó un total de 618.000 toneladas. Según las estimaciones de esta asociación, al finalizar la presente campaña contarán con unas existencias de 195.000 toneladas, lo que supone un descenso del 35% respecto a la anterior.

Excepto en Cataluña, en el resto de las zonas productoras se registraron altas temperaturas en la época de floración y, además, algunas variedades se están viendo afectadas por la enfermedad conocida como aceituna jabonosa, especialmente sobre aquellos frutos previamente picados por prays o mosca.

Según Asaja, la situación en la Unión Europea “no es mucho mejor”, salvo en Grecia, donde se espera una buena cosecha aunque por debajo de las expectativas iniciales. Por su parte, Italia tendrá que importar unas 500.000 toneladas mientras que Francia también disminuirá su producción y en Portugal se esperan unas 90.000 toneladas.

Los productores mostraron su preocupación por “la falta de regulación de la rebusca” y se ofrecieron a colaborar con las administraciones y los cuerpos de seguridad para controlar esta práctica. Para Asaja, esto cobra especial interés en campañas como la presente debido a que la baja cantidad de fruto disponible “facilita el robo de aceituna”.