Así lo pone de manifiesto el informe presentado este viernes por la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción Voluntaria del Embarazo (ACAI), sobre el perfil de las menores que abortan sin el consentimiento paterno.

Según este trabajo, la tasa de aborto entre los 15 y los 19 años en España asciende al 13,9%, “una de las más bajas de la UE”. De las 913 menores que abortaron en 2014, el 12,34% acudió a la clínica sin acompañantes y no informó a sus padres y tutores.

Estas 113 menores en general pertenecen a “familias desestructuradas, con los padres en prisión, inmigrantes que viven solas, emancipadas de facto, víctimas de abusos o de familias abiertamente contrarias al aborto)”.

Además, representan el 0,44% del total de las que interrumpieron su embarazo, por lo que “no se justifica un cambio en la ley actual”, indican los autores del estudio.

La presidenta de ACAI, Francisca García, apuntó que “las causas por las que no informan a sus padres son prácticamente las mismas que las que encontramos en los estudios de 2010 y 2011”, cuando las menores que abortaron sin consentimiento paterno fueron 151 al año.

En general, explicó “son mujeres muy muy vunerables, de entornos desestructurados, a las que un cambio legal condenará a la clandestinidad o a la maternidad forzosa. Son muy pocas, pero el cambio que pretende el PP les va a suponer un gran daño”, agregó García.

En su opinión, ya que el 70% de las menores de 19 años mantienen relaciones sexuales y un 40% de estas no utiliza métodos anticonceptivos, “el Gobierno haría mejor” en incidir en la prevención en lugar de tratar de “estigmatizar a estas mujeres”.