En la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno del Ayuntamiento, Botella eludió como pudo las insistentes preguntas acerca de si Aguirre debería dimitir de la Presidencia del PP y renunciar a cualquier posible pretensión de presentarse a las elecciones municipales después de que su ex número dos, Francisco Granados, haya sido encarcelado como presunto cerebro de la trama de corrupción destapada por la ‘Operación Púnica’, y otros cuatro alcaldes populares de la Comunidad hayan entrado igualmente en prisión.

En primer lugar, no quiso comentar las palabras de Aguirre en la radio asegurando que no piensa dimitir, porque, indicó Botella, “cada uno es responsable de sus declaraciones” y “no estamos para comentar la declaraciones unos de otros”. Después, dijo que “cada uno es responsable de sus propios actos” y que Aguirre “tendrá que tomar sus decisiones en base a lo que ella considere que es su responsabilidad”.

Según recordó, ella no está en el Comité Electoral ni en los órganos competentes del partido para decidir el futuro de sus militantes, por lo que avisó de que no iba a pronunciarse.

Finalmente, cuando se le preguntó qué haría ella si se encontrara en la situación de la presidenta del PP de Madrid, Botella contestó: “Yo haría lo que considerara que es mejor para mi partido y para los madrileños. Pero no me puedo poner en ese supuesto”.