Rajoy realizó estas declaraciones en la rueda de prensa que ofreció en el Palacio de la Moncloa junto a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, tras reunirse con ella con motivo de su visita de Estado. Se expresó así al ser preguntado por "la responsabilidad" de Aguirre al haber nombrado como ‘número dos’ en el PP de Madrid y en la Comunidad de Madrid a Francisco Granados, uno de los principales imputados en la ‘Operación Púnica’.

“La principal obligación de un dirigente es ser justo. Aguirre se ha equivocado, como yo”, admitió Rajoy para reconocer que tiene que ser, además, “equilibrado”. “Es un activo muy importante de nuestro partido y, si me hace hoy esa pregunta, cuenta con mi apoyo”, afirmó el presidente del Gobierno.

Rajoy respaldó a Aguirre, uno de los nombres que suenan en las quinielas como posible candidata del PP para la Alcaldía de Madrid en las elecciones municipales del próximo mayo, después de ésta reconociera hoy que no tiene intención de “abandonar el barco, cuando parece que se hunde” y dejara abierta la posibilidad de que Rajoy sea candidato del PP de cara a las próximas elecciones generales.

El presidente del Gobierno, que reconoció que para evitar que se repitan los errores, lo primero es “reconocer el error”, defendió que es “bueno pedir disculpas no sólo en la actividad política, sino en cualquier faceta de la vida”. “No va en detrimento de las personas”, justificó para asegurar que “los seres humanos se equivocan”.

“IMPUNIDAD NINGUNA”

A partir de ahí, Rajoy reconoció que “hay casos de corrupción”, pero que “afortunadamente no hay impunidad ninguna” y que “quien la hace la paga”. Destacó que están actuando los tribunales de justicia, la Agencia Estatal Tributaria, la Intervención General del Estado y la propia Fiscalía.

“Es malo, enormemente negativo y descorazonador que se produzcan casos de estas características, pero nos queda que está actuando la Fiscalía”, dijo para anunciar que el Gobierno facilitará “todos los medios personales y materiales”, y la mejora de las leyes, para que este tipo de acontecimientos "no se vuelvan a repetir".

En este sentido, Rajoy anunció que el Consejo de Ministros de mañana aprobará la creación de nuevas 112 plazas de magistrados, 167 plazas de jueves de adscripción territorial, dos plazas de magistrados para la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, así como el Estatuto del Consejo de la Transparencia y del Buen Gobierno que velará por la Ley de Transparencia.

Descartó que estas decisiones sean “extraordinarias”. “Ya estaban previstas, van en la línea de ser eficaz y hacer las cosas bien”, afirmó para reclamar como “muy positivo" que en relación a ese conjunto de leyes "hubiese el mayor consenso por parte de todos”.

“Hemos hecho una oferta al conjunto de grupos para que intenten colaborar y construir además de la labor de crítica”, aseguró Rajoy después de que el PSOE rechazara esta semana suscribir un pacto con el PP en materia de corrupción después de que saliera a la luz la ‘Operación Púnica’.

El jefe del Ejecutivo descartó que las leyes actuales estén “agotadas”. “Hay normas que son muy útiles y eficaces, pero no tiene que ver con el permanente afán de mejorar en las leyes”, dijo.

"SEPARAR POLÍTICA Y NEGOCIOS"

Bachelet, por su parte, defendió que su Gobierno hará “todo lo que se pueda hacer en el país para separar la política de los negocios”. “Es esencial asegurar financiación pública de la política para separar los intereses y evitar que otros instrumentos se crucen”, dijo.

“Queremos terminar con la posibilidad de que las empresas financien candidaturas y sean personas naturales las que lo hagan”, avanzó para “evitar situaciones que quienes están tomando decisiones puedan tener intereses cruzados”.

Bachelet descartó pronunciarse sobre la experiencia española porque, dijo, no lo conoce en profundidad y aseguró que la corrupción no fue uno de los temas en la reunión que mantuvo con Rajoy.