En la rueda de prensa posterior al Consejo Ejecutivo de este martes, Homs reconoció que la política entre los partidos soberanistas "no funciona" como lo está haciendo la movilización de su base social y llamó a tener la flexibilidad suficiente para que, si "las cosas no cuajan", terminen cuajando.

En todo caso, expresó la "predisposición" del Gobierno catalán a revisar y mejorar lo que haga falta para reforzar la consulta del 9-N y aseguró que si sale bien "será un éxito del país, un éxito de todos".

El portavoz del Gobierno ve "público y notorio" que el operativo de la consulta "va avanzando" con la colaboración de voluntarios y ayuntamientos y señaló que el Ejecutivo autonómico está "volcado" para que las urnas se pongan y la gente participe de forma muy activa".

DIFÍCIL DE IMPUGNAR

Según reivindicó, ésa era "la esencia" de la consulta aun antes de que la suspensión cautelar por el Tribunal Constitucional obligara a reformularla. A una pregunta, aseguró además que ahora se están "haciendo las cosas de manera que (en el Gobierno central)lo tendrán muy difícil si quieren impugnarlas".

A otras cuestiones, Homs negó que haya "tensión" entre los consejeros de CDC y los de UDC en el Gobierno catalán y aseguró que los presupuestos de la Generalitat para 2015 se están elaborando con normalidad, contando con que ERC no los apoyará, pues ya lo ha anunciado, pero sin que haya tampoco conversaciones con el PSC.

Para todo lo referente a las hipotéticas elecciones anticipadas, Homs recurrió a decir que su convocatoria es competencia exclusiva e indelegable del presidente de la Generalitat y que la elaboración de la lista única, que en cualquier caso Artur Mas presentó como opinión personal, es cosa de los partidos políticos.

Sólo cuando se le preguntó por la fecha concreta que según algunas informaciones publicadas estaba barajando el Gobierno catalán, Homs la desmintió tajantemente: "El 25 de enero ya le digo que no. Eso seguro".