Desde la consultora destacaron que España “se convierte en uno de los destinos de inversión preferidos de Europa” y que el tercer trimestre del presente ejercicio “presenta datos muy positivos”.

En concreto, entre julio y septiembre Madrid registró una inversión directa en edificios de oficinas de 472 millones de euros, y Barcelona sumó 586 millones.

En cómputo anual, la capital sumó 750 millones de euros y la Ciudad Condal, 790 millones de euros.

En cuanto a las rentas, JLL indicó que éstas “continúan estables o con ligeros ascensos”, debido principalmente a una falta de oferta de calidad en el centro de Madrid.

En este sentido, apuntaron que “se espera que la capital se convierta en la segunda ciudad de Europa con mayores crecimientos de renta en los próximos cinco años”.