Las imágenes emitidas por un canal de la televisión local muestran que, en la madrugada de este miércoles, seis policías se llevan al trabajador social Ken Tsang Kin Chiu con las manos atadas a la espalda a un rincón y lo tumban en el suelo.

El vídeo, que es público, muestra cómo algunos agentes le dan patadas y puñetazos de forma reiterada mientras Tsang está acurrucado en el suelo y otros policías miran sin intervenir.

Amnistía Internacional señaló que se ha puesto en contacto con un abogado que asiste a Tsang y que el letrado confirmó los detalles de la agresión y dijo que la policía se llevó a su defendido a un hospital local para que lo atendieran.

Mabel Au, directora de Amnistía Internacional Hong Kong, subrayó que el acto “parece una agresión brutal contra un detenido que no representa ninguna amenaza para la policía” y que “cualquier investigación sobre este incidente deberá realizarse sin demora y todas las personas implicadas en actos ilegales deben ser enjuiciadas”. “Revuelve el estómago pensar que en Hong Kong hay policías que creen que están por encima de la ley”, añadió.

Según el abogado, Tsang fue detenido inicialmente por agresión a un policía, aunque posteriormente se cambiaron los cargos a reunión ilegal e impedir que la policía cumpliera su obligación. Amnistía apuntó que el manifestante sigue bajo custodia policial y será entrevistado tras recibir tratamiento médico.

LIBERTAD DE EXPRESIÓN

El incidente se produjo alrededor de las 3.00 horas de este miércoles en Hong Kong (las 21.00 horas de ayer en la España peninsular) cuando la policía trataba de expulsar a los manifestantes prodemocracia que habían ocupado una calle frente al escenario principal de la protesta, en el centro de la región administrada por China.

Amnistía señaló que la policía usó pulverizadores de pimienta contra decenas de manifestantes y, según fuentes policiales, se practicaron 45 detenciones. “Todas las personas detenidas sólo por ejercer sus derechos a la libertad de expresión y de reunión deben ser puestas en libertad inmediata e incondicionalmente”, dijo Mabel Au, quien añadió que “Amnistía Internacional insta a la policía de Hong Kong a que muestre moderación y evite cualquier uso ilegal de la fuerza”.