Así lo pedirá a través de una proposición de ley el portavoz en materia de Exteriores de CiU, Jordi Xuclà, en la que reclamará que se reconozca el puerto de Palamós (Girona) como un puerto Schengen y pase a formar parte de las fronteras exteriores. El Acuerdo Schengen, del que España forma parte desde 1991, permite viajar libremente entre los Estados firmantes sin necesidad de visados ni controles policiales ni aduaneros al dejar su país o al entrar en otro Estado perteneciente a este convenio.

El Estado español también es uno de los países con más puertos con frontera exterior Schengen. Por ello, CiU considera "que se deberían revisar los criterios de coste-eficacia del mapa actual y plantearnos por qué algunos de estos puertos, como el de Palamós, no han conseguido esta condición pese a que los datos de su actividad lo avalan".

CiU vio "importante" determinar qué puertos o aeropuertos son considerados Schengen, "ya que en el momento en que una infraestructura consigue la consideración de punto fronterizo exterior o frontera Schengen se incrementa su potencial como dinamizador de la actividad turística, económica y comercial internacional". Un hecho que "puede tener importantes repercusiones en economías tan abiertas como la española y la catalana en particular", señala.

Entre otros aspectos, CiU pedirá al Ejecutivo en la Cámara Baja que se presente en el plazo de tres meses un informe sobre el tráfico de personas y mercancías en las actuales fronteras exteriores Schengen de los puertos españoles, y se realice un plan de racionalización de los puertos con frontera exterior Schengen.