La compañía se pronunció así en un comunicado tras haber recibido la notificación de la CNMC respecto al inicio de la investigación en el sector turronero sobre posibles prácticas anticompetitivas consistentes en la fijación de precios y el intercambio de información comercialmente sensible.

En este sentido, la compañía indicó que “siempre ha cumplido con la legalidad y desarrollado una estrategia comercial independiente”, y señaló que ‘1880 el Turrón más caro del mundo’ y ‘El Lobo qué gran Turrón’ son marcas con un posicionamiento “claramente diferenciado”. De hecho, este año ‘1880’ va a presentar varias innovaciones que serán comunicadas a nivel nacional en la campaña de televisión y en el reciente portal digital corporativo del grupo, al tiempo que ‘El Lobo’ presenta una nueva línea de pralinés, indicó la compañía.

“La estrategia de Almendra y Miel siempre ha sido una férrea apuesta por la calidad tanto de los productos de alta gama como de los productos medios a través de una excelente relación calidad precio acompañada de presentaciones atractivas y novedosas”, añadió.