Así lo manifestó el secretario general de la CEE, José María Gil Tamayo, en una rueda de prensa convocada con motivo de la 233 reunión de la Comisión permanente de este organismo eclesiástico, durante la que se ha aprobado una nota en defensa de la vida “desde su inicio hasta su fin natural”.

En este sentido, Gil Tamayo abogó por que la Iglesia utilice su derecho de libertad de expresión, pero insistió en que la participación activa en manifestaciones corresponde a sus fieles y a la sociedad civil, aunque sí reiteró su opinión de que el Gobierno retiró su anteproyecto de ley por “cálculos electoralistas”.

Preguntado por si respaldaba la petición de algunas organizaciones provida de que se retire el voto al PP por incumplir su programa electoral, el también portavoz de la Conferencia Episcopal recordó que desde la transición democrática, la Iglesia no ha dicho a quien tienen o no que votar sus fieles, aunque sí afirmó que la gente tiene que votar en consonancia con sus principios y creencias.

Eso sí, a pesar de los “reveses electorales”, Gil Tamayo llamó a la sociedad a no rendirse y a seguir luchando por la vida y contribuyendo a proteger y acompañar a todas las mujeres embarazadas para que en situaciones de dificultad “no elijan el camino de la muerte”. Y es que, en su opinión, “defender la vida es tarea de todos”.