La promoción del uso del casco por parte de los ciclistas, según el colectivo, sería una de las herramientas más útiles para reducir este peligro. De hecho, aseguran que el uso de esta herramienta de protección por parte de los ciclistas contribuye a aminorar la incidencia de cualquier lesión craneal que se pueda producir como consecuencia de una caída o un accidente.

A juicio de Famma, la polémica acerca de si la eficacia del casco ciclista no ayuda a que se generalice su uso en la ciudad. No obstante, subrayan que existen abundantes evidencias científicas que demuestran que su uso puede evitar entre el 63% y el 88% de las lesiones graves en la cabeza y el cerebro como consecuencia de una caída o accidente.

Ante esta situación, la federación apuesta por el desarrollo de planes y acciones de sensibilización que contribuyan a fomentar el uso del casco en ciudad a cualquier edad, ya que, de esta manera, se reducirá el riesgo de sufrir lesiones de gravedad que acarreen discapacidades severas.