El presidente de FEHR, José María Rubio, aseguró este lunes en rueda de prensa que este hecho, que afectará principalmente a los bares, provocará la "ruina del sector". Según explicó, la prohibición total de fumar supondrá una caída de las ventas del 10%, puesto que el consumo de productos hosteleros está asociado al consumo de tabaco.

Con respecto a la posibilidad de que Sanidad permita seguir vendiendo tabaco en bares, cafeterías y restaurantes, Rubio afirmó que "la venta de tabaco no es negocio para la hostelería", ya que para obtener un margen bruto de 600 euros al mes es necesario vender 4.000 cajetillas.

Asimismo, FEHR cree que la prohibición total de fumar tendrá en España una grave repercusión económica y supondrá un perjuicio para el sector como ha ocurrido en Irlanda, único país de la UE que prohíbe fumar en todos sus establecimientos, y donde el 24% de los bares y el 8% de los restaurantes cerró entre 2004 y 2008.

Por este motivo, el presidente de la Federación Española de Hostelería pidió que se mantenga la ley actualmente vigente, puesto que es "una buena ley, que se adapta a la realidad social y de la hostelería de nuestro país".

Según las estimaciones de los hosteleros, antes de la aplicación de la actual ley contra el tabaquismo en los establecimientos de ocio y restauración, el espacio destinado a las personas no fumadoras no llegaba al 0,5%, mientras que a día de hoy el espacio libre de humos supera el 50% del total.

En este sentido, Rubio añadió que el imcumplimiento de la ley por algunos de los empresarios "no puede ser admitido como argumento por las autoridades sanitarias para invalidar la ley actual".

Además, manifestó que se han utilizado argumentos "inciertos y malintencionados" que han condicionado la opinión de la sociedad en general, que cree que está prohibido fumar en toda la UE.

Por último, Rubio quiso hacer hincapié en el hecho de que los hosteleros están a favor de la lucha contra el tabaco, pero en contra de las pérdidas de su sector.