Según informó hoy el BNG, Fernández Dávila reclama al Gobierno que “encargue la realización de los estudios necesarios que ofrezcan datos concluyentes y rigurosos sobre la afectación a la salud humana de este tipo de escáneres”.

A su juicio, la instalación de estos dispositivos en el Estado español como medida para incrementar la seguridad “presenta numerosos interrogantes que se deberían resolver antes de implantarlos en los aeropuertos”.

"Además de suscitar dudas fundamentadas sobre la violación de la intimidad de los ciudadanos, máxime en el caso de los menores de edad, estos aparatos también son cuestionados desde el punto de vista de la afectación a la salud humana”, afirma la diputada gallega.

En este sentido, recuerda que, “según advierten diversos expertos, aunque los escáneres de rayos X, los que se utilizan en Estados Unidos, se presentan como inocuos, por emitir dosis muy bajas, sí penetran en el cuerpo humano, y a la larga sí pueden resultar perjudiciales para la salud”.

En cuanto al escáner de radiación de ondas milimétricas o de rayos T, Olaia Fernández Dávila advierte que, “aunque también se pretende presentarlos como más seguros, ya que no emiten radiaciones ionizantes, al parecer no existen datos concluyentes y fiables sobre el grado de penetración de este tipo de olas electromagnéticas”.

Por eso, “ante a falta de confirmación oficial y concluyente sobre el riesgo que supone para la salud humana los escáneres de los aeropuertos", Fernández Dávila sugiere al Gobierno que aplique "el principio de precaución, anteponiendo la protección de la salud pública" y no autorizando la instalación de este tipo de aparatos en los aeródromos.