Esta es la octava edición consecutiva en la que recorrerán en cinco días el último tramo del Camino de Santiago, que separa las localidades de Neda y Santiago.

Con esta actividad, sus promotores tratan de complementar el ejercicio físico con la vivencia del Camino de Santiago, al tiempo que los participantes continúan con la Fase III de la rehabilitación cardiaca de su corazón. La Fase III tiene lugar una vez que el paciente recibe el alta del programa de rehabilitación cardiaca y consiste en la realización de ejercicio físico diario, observar una dieta variada y baja en grasas, así como seguir la medicación prescrita por los cardiólogos.

Para ello, cuentan con un coche de apoyo que espera el paso del grupo en tres puntos del recorrido, un desfibrilador semiautomático y un guía especializado.

Los promotores de la iniciativa pretenden combinar la experiencia de realizar una parte del Camino de Santiago con la concienciación de la importancia de realizar ejercicio como una actividad de rehabilitación cardiaca.