Según informó la ONU, esto fue posible por las mejoras en el acceso transfronterizo de convoyes humanitarios, después de que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobara el pasado 14 de julio una resolución. En concreto, ese día se acordó autorizar la llegada de ayuda humanitaria a zonas de combate en Siria a través de cuatro pasos fronterizos sin necesidad de contar con el visto bueno del presidente de este país, Bachar el Asad.

Por ello, el PMA y sus entidades asociadas lograron introducir alimentos desde otros países fronterizos para llegar a más de 580.000 sirios en las seis últimas semanas, cuatro veces más de los 137.000 que se beneficiaron de la asistencia humanitaria en las seis semanas anteriores, según informó hoy este organismo de Naciones Unidas en un comunicado.

Desde el pasado 25 de julio, cinco convoyes del PMA llegaron a Siria a través de los pasos fronterizos de Bal al Salam (Turquía) y Al Ramtha (Jordania), con raciones de alimentos que incluían arroz, lentejas, aceite, pasta, ‘bulgur’, comida enlatada, harina de trigo, frijoles, sal y azúcar para unas 69.500 personas en zonas de difícil acceso como las gobernaciones de Alepo, Daraa, Idlib y Quneitra.

OBJETIVO AMBICIOSO

"Estamos llegando a más gente todos los días con necesidad alimentaria urgente, muchos de ellos han estado pasando hambre durante meses”, indicó el coordinador regional de emergencias en la crisis de Siria del PMA, Muhannad Hadi, quien deseó que “todas las partes en el conflicto” continúen facilitando el acceso humanitario a “mujeres, niños y familias que quedan fuera de nuestro alcance detrás de las zonas de conflicto”.

Sin embargo, el PMA precisó que la inseguridad y los combates generalizados siguen obstaculizando en acceso humanitario a muchas partes del país, sobre todo las gobernaciones del norte, como Ar-Raqqa, Deir ez-Zor y Hasaka.

El Programa Mundial de Alimentos ,que es la mayor agencia humanitaria que trabaja dentro de Siria, tiene como objetivo proporcionar comida a unos 4,25 millones de personas cada mes en las 14 gobernaciones de Siria, con el apoyo de la Media Luna Roja Árabe Siria y más de una veintena de entidades asociadas.

Por último, precisó que necesita recaudar unos 35 millones de dólares cada semana (unos 26,7 millones de euros) para satisfacer las necesidades alimentarias de las familias afectadas por el conflicto en Siria y los refugiados desplazados a países vecinos.