Así lo refleja el "Balance de la Lucha contra la Inmigración Ilegal 2009", que presentó este sábado en rueda de prensa el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Durante 2009 trataron de entrar por las costas españolas 7.285 "sin papeles", frente a los 13.425 de 2008. El descenso del 45,7% constituye el tercer año consecutivo de disminución.

Los buenos resultados se consiguen en gran medida por el freno a la entrada irregular en Canarias, que se recorta en un 75,5% (de 9.181 cayucos en 2008 a 2.256, lo que convierte a 2009 en el mejor año de la última década). Según reconoció Rubalcaba, este buen indicador del archipiélago obedece en buena parte a la lucha desarrollada en origen desde Africa por países como Senegal, de donde no llegó ningún cayuco en todo el año. En 2009, también retroceden las llegadas anómalas a Ceuta y Melilla (-8,4%, de 1.210 a 1.1108).

NUEVAS RUTAS

Las cifras positivas quedan empañadas por la entrada de irregulares a las costas de la península y Baleares, que crece un 18,7% (de 4.244 a 5.039). "Es cierto que las mafias buscan nuevas rutas, y por eso no debemos bajar la guardia", señaló Rubalcaba, quien atribuyó la disminución "importantísima" experimentada en el conjunto de 2009 a tres factores: "la mejora de los medios policiales, de los procesos de repatriación y de la colaboración con los países de origen y tránsito".

"Se dice que el descenso en la llegada de inmigrantes ilegales tiene que ver con la crisis económica", explicó el ministro, "pero eso es aplicable más a la entrada por aeropuertos de personas de Iberoamérica, que España lo nota; pero en el caso de las costas, la situación de Africa es pavorosa y Grecia e Italia han tenido un año malo".

Por otro lado, el balance de Interior refleja en el capítulo de expulsiones que éstas bajaron un 18,4%, pero aumentaron un 36,4% las del colectivo de personas vinculadas a la delincuencia, hasta llegar a las 7.591 personas.

Para el ministro, hay que subrayar que esas 7.591 personas es una cifra "ridícula" si se la compara con los cinco millones de extranjeros que viven en su inmensa mayoría de forma honesta en España.

Las repatriaciones cayeron un 18,4%, las denegaciones de entrada un 29,5%,las readmisiones un 18,8% y las devoluciones un 39,6%.

En la rueda de prensa, el ministro destacó que la cifra de efectivos policiales dedicados a fronteras e inmigración ha crecido un 55,1% en los últimos seis años, de 10.239 en 2003 a 15.877 en 2009.