El grupo indica en un comunicado que “tiene previsto pagar los atrasos del personal trasladado a otros centros, entre septiembre y noviembre próximos, y mantener el empleo de toda la plantilla”.

“El Grupo Cantoblanco está haciendo grandes esfuerzos por mantener el empleo de sus 1.400 empleados, que trabajan en gasolineras, hoteles, hospitales y colegios del grupo”, continúa la nota. “Tiene previsto en un acto de conciliación pagar las nóminas atrasadas, entre septiembre y noviembre de este año, de quienes han sido trasladados a otras empresas”.

Asimismo, indica que la pasada semana llegó a un acuerdo con dos grandes empresas de catering para el traspaso de más de 400 empleados, y detalla que “en tan solo ocho días ha recolocado a 600 trabajadores”.

Por otro lado, el grupo afirma que hace un año invirtió doce millones de euros en su centenar de establecimientos, “a la espera de culminar la entrada de nuevos socios, que nunca se llegó a producir, Ante esta situación se inició un plan para reorganizar la empresa, que pretende saldar las deudas, recolocar a sus empleados y evitar los despidos de la plantilla”.