En virtud de este acuerdo, el Ministerio del Interior procederá a efectuar “con carácter inmediato” las valoraciones de los daños susceptibles de ser resarcidos.

Para ello, contará con la asistencia de los Delegados del Gobierno en las comunidades que se hayan visto afectadas por sucesos de naturaleza catastrófica, la colaboración con las administraciones territoriales competentes y el asesoramiento técnico del Consorcio de Compensación de Seguros.

La Dirección General de Protección Civil y Emergencias tramitará también los procedimientos oportunos para la concesión de las ayudas y subvenciones que procedan “a la mayor brevedad posible”.

Las bajas temperaturas y los temporales de nieve y lluvia que durante los últimos días de diciembre de 2009 y los primeros días de enero de 2010 han afectado a todo el país provocaron numerosos cortes en carreteras y en la red ferroviaria, el desbordamiento de ríos y “notables alteraciones” en el funcionamiento de los servicios públicos.

Además de la pérdida de dos vidas humanas, se produjeron graves daños en Andalucía y Castilla-La Mancha, donde se han registrado graves desperfectos en viviendas, en infraestructuras y equipamientos públicos.