En declaraciones a la Ser en Baleares, Fernández defendió su sistema y remitió a las organizaciones que se han quedado sin ayudas del Gobierno balear a solicitar las ayudas que convoquen los consejos insulares o los ayuntamientos.

Uno de los requisitos para recibir las citadas ayudas autonómicas, de más de dos millones de euros, era que la actividad de la organización beneficiaria cubriera el 50% del territorio balear, por lo que sólo han sido beneficiadas Cáritas y Cruz Roja, mientras muchas organizaciones pequeñas que prestan ayuda a miles de personas han quedado fuera de la convocatoria.

Por su parte, representantes de dos de las organizaciones afectadas, Ponent Solidari y Mallorca Sense Fam, reclamaron que no se impongan este tipo de criterios, ya que aseguran que su ayuda es fundamental. “Estamos haciendo un trabajo que debería llevar a cabo la Administración”, remarcó el portavoz de Mallorca Sense Fam, Joan Martorell.

Asimismo, Estas organizaciones pidieron que se reconsidere el reparto de las ayudas, aunque el plazo de presentación de solicitudes ya está cerrado. Respecto a este punto, Fernández se comprometió a estudiar las condiciones de próximas convocatorias, pero descartó la posibilidad propuesta por las ONG afectadas.