Según informó la Policía, se hallaron cuatro plantillas, con un peso aproximado de 200 gramos de droga cada una, donde los arrestados habían escondido la sustancia con la intención de evitar ser detectados en el vuelo transoceánico.

En la operación se han intervenido un total de 1.026 gramos de cocaína de gran pureza, 7.415 euros en metálico, 1.146 gramos de hachís y 1.127 gramos de sustancia adulterante, así como prensas hidráulicas, balanzas de precisión y demás efectos.

La Policía Nacional confirmó que, para introducir el estupefaciente procedente de Venezuela en territorio nacional, los arrestados utilizaron las plantillas de sus zapatos durante el vuelo transoceánico. De esta manera, lograron evitar la detección de la droga.

La investigación se inició el pasado mes de marzo, cuando se tuvo conocimiento de que un individuo de origen magrebí, afincado en la capital aragonesa, se dedicaba a la distribución de diferentes sustancias estupefacientes.

En las primeras pesquisas, llevadas a cabo a mediados de julio, los investigadores lograron localizar y detener al proveedor del investigado. Este hombre, que tenía anotados minuciosamente los datos de las transacciones económicas relacionadas con el narcotráfico, resultó ser la cabeza de la organización en España.