De este modo, el porcentaje de población que separa y recicla envases cae del 95 al 83% durante las vacaciones de verano, época en el que el tipo de envase se tiene menos en cuenta en la decisión de compra.

Las razones que llevan a este descenso son la ausencia de cubos domésticos de separación en el lugar de veraneo, argumento que dio el 41% de quienes dicen no reciclar, o la dificultad para acceder a los contenedores, tal y como afirmó el 30%. Asimismo, un 24% señaló que no recicla al olvidárseles por la falta de costumbre.

En el otro extremo, 7 de cada 10 aseguran que es fácil reciclar en verano y un 82% indica que poseen la suficiente información sobre la necesidad e importancia de llevarlo a cabo también en vacaciones.

El objetivo del estudio, además de conocer los hábitos de consumo y reciclaje durante las vacaciones de verano, es sensibilizar a la sociedad sobre la importancia del envase, así como su gestión sostenible durante todo el año, incluidos los meses estivales.

“El descanso estival no tiene que hacernos descuidar el respeto por el medio ambiente y es importante que se mantenga el mismo grado de concienciación con respecto al envase y las mismas conductas de clasificación y depósito en los contenedores que el resto del año”, destacó el secretario general de Hispacoop, Félix Martín.