Estos jóvenes disfrutarán de unos días de diversión y descanso, al tiempo que compartirán emociones y experiencias a las que se enfrentan debido a esta enfermedad, entre las que se encuentran las secuelas físicas y psicológicas.

“Desde siempre, hemos prestado una especial atención a los adolescentes, que forman un colectivo con necesidades específicas que muchas veces son pasadas por alto. Además, es una excelente oportunidad para que los chicos y chicas con cáncer de diferentes asociaciones de padres estrechen amistades”, explicó Pilar Ortega, presidenta de la Federación Española de Niños con Cáncer.

Del mismo modo, María Dolores Castillo, psicóloga y coordinadora del proyecto, considera que muchos de los problemas de los jóvenes y adolescentes son “difícilmente abordables en las consultas tradicionales de médicos o psicólogos”. Por ello, considera el entorno de la iniciativa como “idóneo” para abordar estos comportamientos.