Los 'stress test' del BCE introducirán cierta "flexibilidad" para las entidades nacionalizadas

MADRID
SERVIMEDIA

Los test de estrés que está preparando el Banco Central Europeo (BCE), en su ejercicio de revisión del sistema financiero para la entrada en vigor del Mecanismo Único de Supervisión, introducirán cierta "flexibilidad" en el caso de las entidades nacionalizadas.

Fuentes del Eurosistema explicaron que esta flexibilidad no se dará en la fecha de corte de cómputo de los balances de las entidades, que se mantendrá a 31 de diciembre de 2013.

En este sentido, explicaron que el "único" elemento de flexibilidad es en relación con algunos puntos de los test de stress y no con el Asset Quality Review (AQR, revisión de calidad de los balances).

Por ello, el regulador europeo tendrá en cuenta a la hora de realizar este ejercicio los planes en marcha de las entidades nacionalizadas, siempre y cuando estén expresamente recogidos en el mismo.

Por ejemplo, puesto que las nacionalizadas están obligadas a reducir balance, se contemplarán sus Activos Ponderados por Riesgo (APR) según vayan reduciéndose hasta el año 2016, mientras que para el resto de entidades es una foto "estática".

Ello quiere decir que el denominador contabilizado de las entidades nacionalizadas será más bajo y por tanto más "flexibilizado" que para el resto.

No obstante, este ejercicio recoge sólo a título informativo un punto en el que las entidades podrán comunicar algún tipo de explicación de actuaciones acometidas entre enero y septiembre de 2014, que no se computarán a efectos de esta prueba.

PLAZOS

De acuerdo con el calendario fijado por el BCE, los resultados de este ejercicio se harán públicos en la segunda quincena del próximo mes de octubre, mientras que los detalles del ejercicio de 'join-up', que casa los resultados del AQR con los test de estrés, se conocerán en la primera quincena del mes de agosto.

Además, antes de la comunicación final de las pruebas de solvencia y de resistencia, el BCE se reunirá con bancos individuales para "dialogar" sobre los resultados y discutir "cuestiones metodológicas".

Si antes de que se ponga la nota final a las entidades financieras alguna detectase que no podrá cumplir con el nivel de capital, deberá comunicarlo inmediamente a las autoridades europeas, tal y como recoge la legislación.

Entonces, el BCE dará un plazo, a las entidades que finalicen el ejercicio con déficit de capital, de dos semanas para presentar un plan de recapitalización. A partir de ahí, las entidades tendrán entre 6 y 9 meses para cubrirlo, dependiendo del escenario base o el estresado.

Por último, las citadas fuentes del Eurosistema explicaron que la intención es que los déficit que pudiera aparecer a raíz de este ejercicio se cubran mayoritariamente con dinero privado, si bien no es descartable el dinero público.

"Incentivos para pedir dinero público ninguno y esta situación cada vez se está endureciendo más para que las ayudas sean privadas", concluyeron las mismas fuentes.

(SERVIMEDIA)
17 Jul 2014
GFM/caa