Casi uno de cada tres niños en Europa tiene problemas de sobrepeso o de obesidad
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Aproximadamente uno de cada tres niños tiene problemas de sobrepeso o de obesidad, según el mapa de las políticas alimentarias aplicadas en la UE, que ha elaborado el Centro Común de Investigación (JRC) de la Comisión Europea.
“Casi uno de cada tres niños en Europa sufre de sobrepeso o de obesidad y corre por esta causa el riesgo de desarrollar una serie de enfermedades que, sin embargo, podrían prevenirse, incluida la diabetes de tipo 2. Las escuelas pueden ayudarnos considerablemente en nuestro objetivo de que los niños adopten hábitos alimentarios saludables que les permitan crecer con buena salud, rendir adecuadamente en la escuela y desarrollar todo su potencial personal”, explicó Tonio Borg, comisario europeo de Salud.
En este mapa se recoge que los países europeos reconocen la importancia que tienen para la salud, el desarrollo y el rendimiento escolar de los niños los alimentos ofrecidos en las escuelas. De hecho, todos los países estudiados (los 28 Estados miembros, más Noruega y Suiza) disponen de directrices para la política alimentaria de los centros escolares, que varían desde el establecimiento de recomendaciones voluntarias hasta la prohibición de la presencia en las escuelas de máquinas expendedoras de golosinas y de bebidas azucaradas.
“Este informe aporta una buena base para que los políticos, educadores y científicos europeos investiguen las posibles relaciones entre la salud pública y las políticas alimentarias de las escuelas y para que evalúen el nivel de efectividad conseguido en la promoción de unos hábitos alimentarios saludables”, subrayó Máire Geoghegan-Quinn, comisaria de Investigación, Innovación y Ciencia.
Los datos del informe revelan que más del 90 % de las políticas estudiadas incorpora normas alimentarias para garantizar unos menús equilibrados. A esas políticas les siguen en importancia las directrices sobre el tamaño de las porciones de comida (76 %) y las normas sobre nutrientes para el almuerzo (65 %). Por su parte, son muy frecuentes (65-82 %) las restricciones o recomendaciones referentes a la disponibilidad de bebidas, y la mayoría de ellas aboga por un acceso gratuito al agua natural potable y limita o prohíbe específicamente los refrescos azucarados.
Al mismo tiempo, mejorar la nutrición infantil, promover a través de la enseñanza dietas y hábitos de vida saludables y reducir o prevenir la obesidad en los niños constituyen objetivos prioritarios de carácter general que comparten la mayoría de los países.
Del mismo modo, el 59 % de las políticas exige o recomienda que se midan los resultados de las políticas alimentarias escolares.
Las máquinas expendedoras se someten a restricciones en cerca de la mitad de los países estudiados. Tales restricciones van desde las que recomiendan una opción de productos más saludables en las máquinas, hasta los que las prohíben en los centros escolares, pasando por las que se limitan a prohibir la venta de productos poco saludables.
Por último, constituye también una práctica común la imposición de limitaciones a la comercialización de alimentos poco saludables.
(SERVIMEDIA)
16 Jul 2014
MST/gja