La causa principal de estos percances son las caídas en el hogar (6 niños de cada 1.000 fallecen por este motivo), en el colegio, los parques y la calle; seguida de los accidentes de circulación y los atropellos.

El número total de accidentes infantiles que se producen anualmente en España ronda los 160.000. A causa de las lesiones 400 niños fallecen y cerca de un 25 por cinto sufren discapacidades u otro tipo de secuelas psicológicas.

Sólo un 0,5 por ciento de los chavales que llegan a un hospital lesionados reciben asistencia por malos tratos y no por accidentes fortuitos.

La incidencia máxima de los accidentes infantiles, según el sexo, se produce en mayor medida entre los niños (un 61,3 por ciento), mientras que las niñas rondan el 38,7 por ciento.

Los niños accidentados provienen en mayor medida del medio rural, en un 59,5 por ciento de los casos, mientra que en las ciudades la cifra es de un 41 por ciento.

Un total de 44 de cada 100 percances infantiles se producen en el hogar, un 36 por ciento en la calle, un 12 por ciento en un medio de transporte y el 8 por ciento en la escuela.

En el primer año de vida de los pequeños sólo se registran un 2 por ciento de los accidentes; entre los 12 meses y 4 años, un 31,3 por ciento; entre los 5 y los 9 años, un 41,6 por ciento; y desde los 10 a los 14 años, un 24,8 por ciento.

La máxima incidencia de ccidentalidad infantil se produce en los meses de julio y agosto, seguidos de abril y mayo. La siniestralidad desciende en los meses de diciembre y enero.

FALTA DE PREVISION

Alberto Iñón, experto argentino en prevención de accidentes infantiles, que participa en el simposium, aseguró que "siempre que se produce un accidente infantil está detrás la responsabilidad de un adulto, sus padres, sus profesores, sus familiares o las autoridades que diseñan las ciudades".

A su juicio, la falta de previsón y de prevención son los factores determinantes de esta elevada accidentalidad y las cifras se reducirían si existiera mayor información sobre este asunto.

Por ello, el presidente de la Asociación para la Prevención de Accidentes Infantiles, Francisco Aguilar, anunció la creación de un registro estatal de accidentes infantiles. Cada hospital con servicio de pediatría tendrá que elaborar su propio registro anual, que quedará recogido en el registro de ámbito estatal.

En su opinión, es necesario grupar esfuerzos en un único proyecto para "atajar la accidentalidad incidiendo en los aspectos de riesgo", algo imposible de tratar si se carece de información y de estadísticas que revelen estos factores de riesgo.

El registro nacional seguirá las pautas utilizadas por el Departamento de Pediatría del Hospital Gregorio Marañón dirigido por Juan Vázquez, que desde hace tres años elabora el primer registro de accidentalidad infantil.