Los médicos se constituyen, de aucerdo con este estudio, en la principal fuente de información para un 63 por ciento de los ciudadanos, mientras que en tercer lugar -por detras de los medios de comunicación- aparecen los libros especializados (36%), los prospectos de los medicamentos (29%), la familia,los migos (22%) y los farmacéuticos (19%).

Otra de las conclusiones del citado informe, elaborado por la Asociación Europea de Especializadades Farmacéuticas Publicitaras, y presentado por su director general, Huberto Craz, es que los españoles son muy poco dados a 'quedarse quietos' cuando tienen síntomas de enfermedad o malestar, aunque no llegan a la mitad los que deciden ir al médico.

Frente al 2 por ciento que afirma "no utilizar nada" en estas situaciones, y el 47 por ciento que declara visitar al médico o dentista, las otras alternativas, por orden de importancia, son: usar un medicamento de los que se adquieren sin receta (25%), admnistrarse un fármaco de prscripción que se tiene en casa (17%) y recurrir un remedio casero (5%).

Respecto a la utilización en España de las Especialidades Farmacéuticas Publicitarias (EFP) los medicamentos que se venden directamente en las farmacias para trastornos menores se encuentran a un nivel notablemente inferior al de la mayoría de los países de la CE, mientras que en lo que se refiere al consumo de fármacos con receta que se tienen en el domicilio, sucede lo contrario.

AUTOMEDICACION RESPONSABLE

Frente al uso "eligroso o temerario" de los fármacos 'de receta' guardados en el botiquín familiar, sin que el médico los haya prescrito para la ocasión, el presidente de estas jornadas, el farmacéutico Pedro Gómez de Agüero, defiende la "automedicación 'responable', o, lo que es lo mismo: el uso racional de las EFP".

"Por ejemplo, y como norma general", añade, "el ciudadano medio en el que no concurran circunstancias especiales sabe, por sus propios conocimientos o experiencias, que no necesita acudir al médico par tratarse o prevenir una gripe o un catarro. En ese caso, lo más lógico es que cada persona acuda a una farmacia, donde se les aconsejará un producto farmacéutico diseñado con seguridad y eficacia para tratar ese problema".