Fuentes jurídicas aseguraron a Servimedia que sería “deseable” que el Tribunal Constitucional pudiera funcionar de nuevo con todos sus miembros al completo en el plazo más breve de tiempo posible.

Sin embargo, reconocen que la coincidencia con la abdicación del rey Juan Carlos y el proceso de sucesión del Monarca podría retrasar algo la designación de su sustituto. Además, el nuevo miembro del TC tiene que jurar su cargo ante el Rey y lo más probable es que lo haga ya ante Felipe VI, cuya proclamación se producirá previsiblemente este mes.

El Gobierno nombró en julio de 2013 al magistrado Enrique López para el Tribunal Constitucional, tras un veto de casi siete años por parte del PSOE cuando los populares intentaban incluirle en el cupo de aprobación por el Senado. En el momento de ser nombrado formaba parte de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional.

Los miembros del TC se renuevan por terceras partes, es decir cuatro cada vez que hay renovación, con una periodicidad de tres años. El primer intento del PP de nombrar a Enrique López como magistrado del Tribunal Constitucional se produjo en 2007, cuando tocaba el turno a los cuatro magistrados que le correspondía elegir al Senado.

Para ello se acordó que las CCAA propusieran candidatos para que, posteriormente, la Cámara Alta pudiera elegir. Los populares acordaron que todas sus autonomías propondrían sólo dos nombres, los de Enrique López y Francisco José Hernando. Pero los socialistas se opusieron y, en el caso de López, esgrimieron que no cumplía el requisito de tener 15 años de ejercicio profesional, aunque también alegaban entre sus razones para oponerse la clara vinculación, a juicio del PSOE, del candidato con los postulados del PP.

La falta de acuerdo entre PP y PSOE para renovar a los magistrados del TC que le correspondía al Senado provocó un retraso de tres años en la renovación de los mismos, ya que el pacto se produjo en 2010, tras la retirada de la candidatura de Enrique López por parte de los populares, aunque en ese momento estos anunciaron que le propondrían como candidato en la renovación que debía hacer el Congreso de los candidatos del TC.

Así, en 2010, los populares volvieron a proponerlo en el Congreso y de nuevo fue vetado porque los socialistas estimaban que el tiempo que el magistrado pasó como portavoz del Consejo General del Poder Judicial no podía computarse como ejercicio profesional en la judicatura, un argumento que el PP rechazaba.

La renovación pendiente en el Congreso no fue posible hasta después de celebrarse las elecciones generales de noviembre de 2011, tras las cuales se retomaron los contactos y López volvió a quedar fuera.

El Ejecutivo de Mariano Rajoy solo logró situar a López cuando fue el turno de la renovación que correspondía al Gobierno. El Tribunal Constitucional se compone de doce miembros que juran su cargo ante el Rey. Cuatro de ellos se eligen a propuesta del Congreso de los Diputados, otros cuatro corresponden al Senado, dos al Gobierno y otros dos los propone el Consejo General del Poder Judicial.