Cruz Roja defiende que la recepción de los inmigrantes en Melilla es el “comienzo” para su inclusión social
- El vicepresidente de la ONG defiende el empleo como la gran herramienta para lograrlo: el 30% de quienes participan en su Programa de Empleo encuentran trabajo
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El vicepresidente de Cruz Roja Española, Fernando del Rosario, recordó este jueves que la atención a los inmigrantes que llegan a España a través de las vallas de Melilla es un primer paso de todo el proceso que realiza la ONG de la que forma parte para insertar a la población más vulnerable en la sociedad.
“Ese camino con ellos no es más que el comienzo de una actuación, es el primer momento, la recepción. Tanto las vallas como las pateras, que son otro de los elementos de los canales de entrada. El de los aeropuertos se ve menos y numéricamente es a través del que más personas vienen, pero los más visibles son la patera y la valla”, insistió Del Rosario en una entrevista en Servimedia.
Pero, “la gran herramienta” de todo el proceso de inclusión “para cualquier colectivo vulnerable” en el que la ONG está haciendo hincapié es introducirlos en su plan de empleo. “Es la ayuda que con más dignidad se puede acercar a las personas”, agregó.
De hecho, recordó que el Programa de Empleo de Cruz Roja, dirigido a cualquier persona con dificultades de inserción, a través de 500 puntos repartidos por toda España, atendió en 2013 a más de 83.000 personas con un alto éxito de inserción: el 30% de ellas lograron un puesto de trabajo. “Es muchísimo más que lo que logra el Estado”, recalcó.
Fernando del Rosario también dijo que, aunque los inmigrantes siguen tratando de buscar un futuro en España, cada vez hay más españoles que se inscriben en el citado programa, invirtiendo los porcentajes: ahora el 60% de los inscritos son españoles, frente al 40% de extranjeros que buscan trabajo.
El vicepresidente de la ONG con más presencia en España también se refirió a otros programas en los que trabaja Cruz Roja para mejorar las condiciones de vida de miles de personas, como son uno de cooperación al desarrollo y otro de diplomacia humanitaria, también denominado como de “abogacía social” para tratar de aprovechar “el peso que pueda tener la institución para influir en la toma de decisiones que podrían cambiar esas realidades”.
CRISIS
Durante la entrevista, Del Rosario también lamentó que con el descenso de las ayudas a la cooperación al desarrollo se pueden “atacar menos proyectos de los que tenemos”, por lo que están “afinando mucho” en aquello que puede ser “verdaderamente importante” para mejorar la vida de las personas.
El vicepresidente de la ONG confirmó asimismo que “está aumentando” el número de personas a las que la crisis económica ha empujado a acudir a Cruz Roja: “Hace dos años hicimos el llamamiento ‘Ahora más que nunca’ para recaudar fondos. Y pretendíamos atender a 300.000 personas más. Han sido tres millones más las que estamos atendiendo”.
Una vez que un solicitante de ayuda contacta con la organización, ésta intenta introducirle no sólo en un programa, sino en otros que puedan contribuir a desarrollar la autonomía social de esa persona. Por ejemplo, concretó que están repartiendo alimentos a un millón de personas; que el programa de éxito escolar dirigido a los más pequeños ha pasado en dos años de atender a 2.000 a 63.000 niños, y que Cruz Roja ha evitado el desahucio de 600 familias.
“La ayuda humanitaria siempre es necesaria, pero siempre la vemos como un primer punto de arranque de un programa de inserción para llegar a la autonomía”, concluyó.
(SERVIMEDIA)
29 Mayo 2014
AHP/LLM/MGR/caa