Según informó este miércoles la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), tras completar el grueso de su Plan de Reestructuración en 2013, finalizó el primer trimestre con un resultado antes de provisiones de 157 millones de euros, lo que supone un incremento del 11%.

El margen bruto del banco fue de 261 millones de euros, un 13,6% menos que en los tres primeros meses de 2013.

El crédito a la clientela se redujo un 8,6%, hasta los 25.060 millones, mientras que los depósitos repuntaron un 1%, hasta 23.300 millones.

El margen de clientes (la diferencia entre la rentabilidad de los créditos y el coste de los depósitos) creció en torno al 20% con relación a marzo de 2013.

En cuanto a la morosidad, ésta cerró el trimestre en el 13,8% del crédito, por encima del 11,8% de un antes.