Según explicó la Policía, el grupo introducía la droga en España mediante barcos contenedores, equipajes de pasajeros en vuelos transoceánicos o vehículos “caleteados”. De hecho, en los registros se han intervenido cinco vehículos, además de la droga, 254.000 euros, prensas hidráulicas, una pistola y un revólver. Han sido arrestadas 11 personas.

Las investigaciones se iniciaron en 2013, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de esta organización, compuesta por ciudadanos colombianos y españoles y con ramificaciones internacionales. En mayo, se detuvo en Valencia a seis miembros del grupo y se les incautaron 11,5 kilogramos de cocaína, 251.000 euros, tres vehículos y un revólver. Al tener conocimiento de estas detenciones, el proveedor de la sustancia y cabecilla de la organización abandonó rápidamente el país.

Más tarde, los agentes comprobaron que estaba planificando su regreso a España para continuar con la importación de cocaína.

En septiembre, se averiguó que estaba preparando un transporte, y que para ello había viajado hasta Sudamérica un hombre que traería la droga oculta entre su equipaje. Fruto de la colaboración policial, la policía portuguesa, con los datos facilitados por los agentes españoles, detuvo a un hombre de nacionalidad española que llevaba 4.650 gramos de cocaína ocultos en su equipaje.

Ya este año, en febrero, los agentes aprehendieron en el puerto de Bilbao 220 kilogramos de cocaína ocultos en el interior de un contenedor de un buque que había partido del puerto de Rotterdam, sin connivencia de la empresa propietaria del envío.

En marzo, detectaron el traslado de una partida de cocaína oculta en un doble fondo de un vehículo desde la ciudad de Málaga hasta la de Valencia. Se localizaron 40 kilogramos de cocaína y una prensa para el procesamiento de la misma, se detuvo a varias personas de nacionalidad colombiana, entre ellos uno de los responsables de la organización y se registraron tres domicilios.

Finalmente, la operación ha culminado con la localización y detención del máximo responsable de la organización, quien estaba escondido en un chalet de una urbanización de San Antonio de Benagéber (Valencia). Tras efectuar el registro de la vivienda, los agentes han localizado un arma simulada y documentación.