Rubalcaba cerró un acto electoral en Zaragoza junto a Elena Valenciano, de la que subrayó su “compromiso, inteligencia, europeísmo y sensibilidad”, y dijo a los ciudadanos que detrás de cada papeleta del PSOE está el nombre de todos ellos.

“Nosotros no tenemos sobres, solo tenemos papeletas, pero ésa es nuestra fuerza, la gente honesta y honrada que quiere cambiar Europa”, afirmó. “Está la cosa en un pañuelo”, aseguró, y los socialistas solo “dependemos de nostros”.

Subrayó que Rajoy está reconociendo en la campaña electoral “que quiere seguir haciendo lo que está haciendo”, y se mete “una y otra vez” con el PSOE porque sabe que es “el único partido que puede impedir que siga haciendo lo que está haciendo”.

“Somos los únicos que podemos ganarle, sabe bien dónde ataca”, aseguró, y por eso el PSOE pide el voto para que el PP “no siga haciendo lo que está haciendo”.

El PSOE es el único que puede “impedir una vuelta de tuerca más” a la reforma laboral, nuevos recortes en sanidad o educación, o ataques a la igualdad. En definitiva, sentenció, el único que puede impedir que Rajoy crea “que tiene un cheque en blanco, barra libre para seguir recortando”.

Se mostró confiado en la victoria porque las campañas son una especie de “radiografía” donde los candidatos se exponen tanto que los ciudadanos “te ven por dentro”, y en esta ocasión los españoles “han visto por dentro a Elena y por dentro a Cañete”.

Si algo ha demostrado Valenciano, aseguró, incluso en el debate televisado, es que los socialistas pueden cometer errores “pero siempre hemos dado la cara”, no como los concejales del PP en Toledo al negarse a escuchar a los padres de niños con cáncer que denunciaban las deficiencias en la atención sanitaria.

Criticó también el mensaje que subyace en medidas del Gobierno, como la reforma del aborto, que dice a las mujeres “que se acabó la fiesta de la emancipación” y que en realidad son “inferiores” a los hombres. Quienes creen eso, afirmó, no pueden ganar estas elecciones.

Rubalcaba advirtió además a quienes defienden la sanidad y la educación que los socialistas universalizaron, que no pueden mantener esa defensa tras las pancartas y luego decir que el PSOE son lo mismo que quienes “se están cargando” esos derechos.