Entre estas medidas, destacó la necesidad de una reforma fiscal que distribuya mejor las cargas impositivas y una reforma de la Administración que revise el funcionamiento del sector público.

En su intervención en el citado foro organizado en Barcelona por Nueva Economía Fórum, Lucena aseguró que "hay margen para aumentar la eficacia recaudatoria" porque "la presión fiscal en España es del 32,6% comparada con el 40%" que registra en su conjunto "la Unión Europea".

El dirigente socialista explicó que "el problema del sistema fiscal español no es de bajos niveles de tipos impositivos sino de los agujeros que existen en el sistema fiscal". En su opinión, la gran mayoría de beneficios fiscales asociados al impuesto de Sociedades y al IRPF se tendrían que replantear y eliminar porque "en la práctica son regresivos, y erosionan la eficiencia del sistema". Por otro lado, "la reforma fiscal española debería subir la tributación sobre los rendimientos del capital y mejor si eso lo hace también Europa".

"Se debe tener en cuenta que todas las reformas tienen ganadores y perdedores". El dirigente socialista hizo estas declaraciones durante su participación en el "Fórum Europa. Tribuna Catalunya", organizado en Barcelona por Nueva Economía Fórum. Maurici Lucena dijo que "el enorme volumen del fraude fiscal es también un problema pero, a pesar de lo que piensen algunos, "no es un comportamiento intrínseco de los ciudadanos".

Para Lucena, la ausencia de reformas "aumentará los episodios de corrupción". En este sentido, considera que el proceso soberanista catalán está paralizando la actividad reformista del Gobierno de la Generalitat y criticó que en el último pleno del Parlament, se abordara la regulación de los animales de circo cuando "hay otros temas, sociales, más importantes".

El aumento de las desigualdades sociales es -insiste el dirigente socialista- un problema "ético, político y económico". En estos momentos, según Lucena "conviene no olvidar los principios de la Ilustración, que promovió el progreso personal y la igualdad de derechos, y muchos ciudadanos tienen la sensación que están siendo vulnerados". Maurici Lucena defendió que "otra característica de la reforma fiscal es que tienen que consolidar impuestos como el de Sucesiones y Donaciones, que es clave, pero también el Impuesto del Patrimonio que es uno de los pocos que grava la riqueza progresiva pero se tienen que aplicar cambios. Es la tributación del futuro pese lo que pese".

En su conferencia, Lucena criticó también que "la atribución de todas las culpas al Estado es una tentación irresistible para el presidente Mas y el gobierno de CiU" pero ahora más que nunca según el dirigente socialista "tenemos que crear espacios públicos de reflexión y debate porque si no, estos espacios los llenará el enemigo del progreso: la mediocridad".