Así lo anunció Vera en declaraciones a Servimedia, señalando que sólo está a la espera de que el próximo día 12 el Tribunal Europeo le envíe oficialmente la sentencia. Explicó que, aunque recibió un oficio que le comunicaba que la decisión se tomó el 1 de diciembre y él ya la conoce por lo aparecido en la prensa, aún no la ha recibido. No obstante, si la resolución se corresponde con lo publicado, dijo que "sin duda" presentará la querella.

Vera recordó que los siete magistrados del Tribunal han atestiguado la "enemistad manifiesta" de Garzón hacia él, que le parece "evidente". A este respecto, concretó: "Habíamos tenido diferencias en el Ministerio del Interior porque él quería el mando de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que se dedicaban al combate contra la droga cuando él era el Delegado" en la materia. "Políticamente no se tomó esa decisión porque era incorrecta. El mando de los Cuerpos de Seguridad tiene que ser uno solo, al menos orgánico".

"Él rivalizó conmigo, porfió conmigo", añadió, "y el ministro José Luis Corcuera y el propio presidente Felipe González se negaron en redondo al traspaso. De ahí viene todo el problema; luego saltó al juzgado, sacó el hacha de guerra y empezó su afán de revancha. El primero que se llevó por delante fue a mí, pero no con la pretensión de acabar conmigo, sino con la de acabar con el presidente del Gobierno".

RECURSO A LA GRAN SALA

Sobre la parte de la sentencia de Estrasburgo que estima, por cuatro votos contra tres, que España respetó los derechos de Vera al abrir el juez del Tribunal Supremo Eduardo Moner una segunda instrucción, distinta a la de Garzón, el condenado cree que "es una contradicción", pues "el proceso ya estaba viciado de origen". Vera recalcó que así lo sostienen los tres votos particulares, incluido el del presidente del tribunal.

Por todo ello, el ex alto cargo de Interior anunció que presentará un recurso a esta parte de la sentencia ante la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, y que desea que lo lleve su antiguo abogado, Manuel Cobo del Rosal, quien, pese a estar ya jubilado y con problemas de salud, su defendido cree que "está decidido a hacerlo".

Vera desmintió que Moner llevara a cabo una segunda instrucción porque él solicitó "que testificasen algunas personalidades francesas, especialmente la jueza francesa (Laurence) Le Vert", y el magistrado no se lo admitió. En su opinión, Moner comenzó a instruir con la imputación del ex ministro del Interior José Barrionuevo, que era diputado y debía ser encausado por un juez del Supremo, pero lo hizo incorporando las actuaciones emprendidas por Garzón contra él y después de los cinco meses que pasó en prisión preventiva.

El ex secretario de Estado negó aspirar a ninguna indemnización si prosperara el recurso, y dijo buscar únicamente el "resarcimiento moral" y, en relación con Garzón, demostrar "que este personaje prevaricó". En este sentido, citó las acusaciones escritas en un libro por el ex comisario José Amedo, afirmando que Garzón le presionó para que testificara contra Vera.