En un comunicado, la OCU advierte de que las normas establecen que los productos rebajados deben haber formado parte de la oferta habitual del establecimiento durante, al menos, un mes y su calidad no puede diferenciarse en nada de la que tenían antes de estar rebajados.

Además, aconseja a los consumidores para que saquen partido a los buenos precios y que las rebajas se conviertan en una buena oportunidad para hacer sus compras más baratas.

Entre las recomendaciones más destacadas se encuentran la de hacer previamente una lista para evitar las compras compulsivas y conservar el tique de las compras ante posibles reclamaciones o cambios. A este respecto, señala que los objetos rebajados deben mostrar su precio original junto al rebajado, o bien indicar de forma clara el porcentaje de rebaja.

Asimismo, indica que en algunos establecimientos se establecen unas condiciones especiales para las compras en período de rebajas (aceptación de pago con tarjeta, devoluciones, etc.). El servicio posventa y la aplicación de la garantía son iguales, independientemente de que se compre el producto durante las rebajas.

Los consumidores, según explica la OCU, deben saber que, si tienen algún problema durante las rebajas, deben actuar de igual forma que en cualquier otro momento, e invita a utilizar las hojas de reclamaciones para defender los derechos de los consumidores.

El consejo de la OCU es que, en lo posible, se procure elegir establecimientos adheridos al sistema arbitral de consumo, que ofrecen más garantías al comprador y que, en caso de desacuerdo, se prestarán a resolver sus diferencias con el cliente de una manera rápida y gratuita.