Un grupo de 15 bomberos, ataviados con su uniforme de servicio, acudió al centro sanitario y, antes de saludar a los niños hospitalizados, realizaron una exhibición de sus habilidades en el patio interior del hospital deslizándose desde el tejado haciendo rappel y otras acrobacias para deleite de los niños, que los veían a través de las ventanas.

Posteriormente, acompañados por miembros del equipo directivo del hospital, recorrieron la tercera planta y repartieron juguetes y otros regalos para alegrar la festividad de los Reyes Magos a los cerca de 120 niños y adolescentes hospitalizados en este centro, según informó el Gobierno regional.

Los bomberos de la región llevan 14 años ininterrumpidos visitando a los niños ingresados en el Hospital Gregorio Marañón con motivo de la festividad de los Reyes Magos, algo que se ha convertido ya en una tradición para este centro sanitario.

"Se trata de un día muy especial en la vida del hospital, ya que los niños ingresados, sus familiares y acompañantes, y también el personal sanitario, agradecen muy sinceramente el buen ambiente que se crea con esta visita gracias a la humanidad, cariño e ilusión que los bomberos desprenden en su contacto con los niños", afirmó el gerente del hospital, Antonio Barba.