Eurovisión encarga a PwC velar contra el voto fraudulento

MADRID
SERVIMEDIA

La Unión Europea de Radiodifusión (UER), organizadora del Eurovisión, ha encargado a la auditora PwC la supervisión de las votaciones en la próxima edición del festival, que se celebrará en mayo en la capital de Dinamarca, Copenhage, para evitar el fraude que ha reconocido que se intentó hacer el año pasado.

Eurovisión contará con “un grupo de observadores independientes de PwC que supervisarán” el proceso de votaciones, “por lo que es muy poco probable que votos fraudulentos puedan llegar a darse por válidos”, según informa RTVE.es.

Eurovisión ha elaborado un vídeo en el que explica cómo se desarrollarán las votaciones. Al igual que los en los últimos años, el ganador del Festival de Eurovisión lo deciden al 50% los telespectadores a través del televoto y profesionales de la industria musical.

Los telespectadores pueden votar con una llamada telefónica, enviando un SMS o a través de la aplicación oficial del Festival de Eurovisión. El tiempo de votación es de 15 minutos, y comienza poco después de la actuación del último país participante. Durante estos 15 minutos, el voto llega al centro de control de datos del Festival de Eurovisión, donde alrededor de 70 expertos y un avanzado sistema informático recopilan y validan los votos de todos los países participantes.

En cada uno de los países participantes, la televisión emisora del certamen (que es miembro de la Unión Europea de Radio y Televisión) elige un jurado compuesto por cinco profesionales de la industria musical, que valoran las canciones interpretadas durante el espectáculo. Les acompaña un notario que supervisa el trabajo y votación de cada uno de los miembros del jurado. El jurado debe ser el mismo en la semifinal y en la final y ninguno de ellos debe haber sido jurado en las dos ediciones inmediatamente anteriores del Festival ni ser trabajador de la televisión que emite el Festival.

El jurado debe seguir en directo desde su país los ensayos generales de la semifinal en la que le corresponda votar y de la gran final. Este ensayo se realiza 24 horas antes de cada gala y los artistas realizan la misma actuación y con el mismo vestuario que luego lucirán en la gala oficial.

Finalizado el ensayo, los jurados emiten sus votos, que permanecen en secreto hasta la gala del día siguiente. En ese momento se combinan los votos del jurado y espectadores, y cada país otorga a la canción más votada 12 puntos. La segunda más votada recibe 10 puntos, la tercera 8 puntos, y así sucesivamente hasta llegar a la décima más votada, que recibe 1 punto.

Si a la hora de combinar los votos del jurado nacional y los telespectadores hubiera empate entre dos o más canciones, el tema más votado por los telespectadores rompería el empate. En el caso de que dos o más canciones recibieran el mismo número de votos por parte de los telespectadores, entonces se tendría en cuenta los ranking de votación de cada miembro del jurado.

La UER anunció el pasado febrero castigos más duros contra los posibles fraudes en las votaciones. La organización ha reconocido que el año pasado se dieron "intentos de influir de forma deshonesta" en los resultados, que no tuvieron éxito gracias a "los estrictos procedimientos de seguridad habilitados".

Varios medios lituanos denunciaron una campaña en la que se entregaron a ciudadanos anónimos tarjetas de móvil cargadas con saldo para apoyar a Azerbaiyán, que acabó segundo con Farid Mamédov.

(SERVIMEDIA)
22 Abr 2014
JRN/gja