Seguridad vial

Un 38% de los conductores tiene la luz de emergencia, pero la mayoría no comprueba si funciona

- Según una encuesta de la Fundación CEA y Asitur

MADRID
SERVIMEDIA

Cuatro de cada 10 conductores españoles disponen del dispositivo luminoso de emergencia que se coloca en la parte superior del vehículo averiado en carretera y que sustituirá obligatoriamente a los actuales triángulos de preseñalización de peligro a partir del 1 de enero de 2026, pero más de la mitad de ellos no comprueba su funcionamiento.

Ésa es una de las principales conclusiones del informe '¿Saben los conductores comportarse con seguridad en caso de avería o accidente?', elaborado por la Fundación CEA y Asitur, y presentado este miércoles en una rueda de prensa por Octavio Ortega, experto en seguridad vial y movilidad sostenible.

El estudio se basa en una encuesta de 15 preguntas realizada a una muestra de 715 conductores residentes en España, mayores de edad, con permiso de conducir al menos de clase B (es decir, para manejar coches).

Un 38% de las personas encuestadas afirma que ya tiene en su vehículo la señal luminosa intermitente (denominada V-16), un dispositivo de color amarillo auto que se coloca en el techo o la parte más alta posible del vehículo inmovilizado y comunica su activación y desactivación vía geolocalización a un sistema por el que se conecta tanto la Direccion General de Tráfico (DGT) como otros vehículos cercanos, que estarán avisados de que se acercan a un coche averiado en carretera.

Sin embargo, el 52% de ellos no comprueba periódicamente su adecuado funcionamiento. El Reglamento General de Vehículos indica que la pila o batería del dispositivo luminoso de emergencia debe garantizar su uso durante 18 meses y que la luz debe mantenerse durante al menos 30 minutos.

LLAMADA A LA GRÚA

Por otro lado, el estudio indica que un 44% de los conductores ha necesitado alguna vez la asistencia de la grúa en los últimos cinco años. El 75% recalca que, en el caso de siniestro o avería, tuvo la oportunidad de detenerse en un lugar seguro y el 95% activó las luces de emergencia y las de posición, según las circunstancias.

El 71% salió por la puerta más alejada del tráfico tras el siniestro o avería en carretera y el 51% recalca que permaneció en el interior del vehículo con el cinturón abrochado cuando no pudo abandonar el coche por encontrarse en una situación peligrosa.

Un 24% necesitó la presencia de la Guardia Civil o agentes encargados de la vigilancia del tráfico y el 67% llamó a la grúa en último lugar después de permanecer en un lugar seguro.

La Fundación CEA y Asitur reclamaron campañas de divulgación sobre la señal luminosa V-16, que la DGT determine las marcas y los modelos que cumplen con los requisitos técnicos necesarios para que el dispositivo tenga geolocalización, y que los aparatos permitan conocer la carga de batería disponible.

(SERVIMEDIA)
15 Jun 2022
MGR/gja