La sección sindical de UGT en Banco Sabadell denunció el pasado miércoles que la entidad despidió el 14 de marzo a una trabajadora por repetidos ataques de epilepsia, trabajadora que tenía reconocida una discapacidad del 37%.

Vañó, en declaraciones a Servimedia, manifestó estar "sorprendido" por este caso y agregó que el banco podría haber ofrecido a la empleada otro puesto de trabajo que no fuera de cara al público, ya que la entidad justifica el despido porque los ataques sufridos por la trabajadora afectaban al funcionamiento normal de la oficina, e impedían que ésta pudiera desempeñar con normalidad sus funciones de servicios al cliente, "no existiendo en la actualidad puesto alguno compatible con las dolencias que le aquejan".

"Siempre hay otras posibilidades", destacó Vañó, quien además anunció que seguirá el desarrollo de este caso porque "hay que respetar la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas".