En declaraciones a Servimedia, Vidal-Quadras señaló que Suárez fue “un hombre al que las circunstancias le llevaron a ser determinante para la evolución histórica de todo un período” e “hizo un gran servicio a España en su momento”. Añadió que el fallecido fue “una pieza clave de una Transición no traumática entre un régimen autoritario y la democracia”.

A su juicio, “la figura de Adolfo Suárez representa en la historia contemporánea de España un momento de importancia similar al que en su día tuvieron Cánovas o, después, Maura”.

Al mismo tiempo, Vidal-Quadras dijo que la muerte del expresidente tiene “un gran valor simbólico en este momento, porque su desaparición coincide con el final del régimen político que él puso en marcha”, en referencia al sistema constitucional de 1978. Según este nuevo dirigente de Vox, el modelo institucional español está “agotado” y necesita “grandes transformaciones”, algo que, paradójicamente, coincide con la muerte de Suárez.