En declaraciones a la Cope recogidas por Servimedia, Fernández Díaz fue preguntado sobre si los atentados de hace diez años en Madrid están totalmente aclarados y afirmó que, al igual que en “magnicidios” como el asesinato de Kennedy, es normal que haya españoles que puedan tener dudas.

Argumentó que “en un atentado en el que murieron 191 personas más un subinspector de los GEO, es normal que se siga especulando quién estuvo detrás, sobre todo por la fecha en la que se produjo y por las consecuencias políticas que tuvo”.

“Yo también estaba convencido”, añadió, “de que había sido ETA quién había cometido los atentados. Ibarretxe y Otegi también estaban convencidos. ¿Por qué?, porque el terrorismo yihadista no se tomaba en serio, se veía como una cosa muy lejana y el de ETA estaba muy presente”.

EXCARCELACIÓN DE ZOUHIER

Asimismo, se refirió a que “la proximidad a las elecciones, que se celebraron solo tres días después (del 11-M de 2004), provocó que la unidad se transformara en una herida que marcó la siguiente legislatura. Esas heridas y esa división aún no han cicatrizado del todo”.

Sin embargo, afirmó que “diez años después se pueden llegar a algunas conclusiones: que ETA no participó. ¿Caso cerrado?, sí. ¿La verdad judicial es la verdad absoluta?, no. Pero mientras que no aparezcan nuevas pruebas la verdad judicial tiene que prevalecer".

Respecto a la próxima excarcelación de Rafa Zouhier, uno de los condenados por la masacre, el ministro dijo que “estamos trabajando para que sea expulsado de nuestro país. Si él toma alguna iniciativa para retrasar esta decisión, la tendríamos que acatar”. Añadió que las víctimas le han pedido que intente que sea expulsado de España y el titular de Interior dijo que esta solicitud “tiene todo el sentido”.