En un auto dictado hoy, Ruz señala que en este causa “lo que pretende el recurrente con su querella es ampliar el procedimiento contra otras personas, distintas del inicialmente querellado, por otro delito distinto”.

Para el juez, “esto implicaría una seria de actuaciones que se apartan del procedimiento inicial, con nuevas diligencias, nuevas posibles imputaciones, y evidentemente, en caso de que la querella no prosperase, una serie de responsabilidades que se habrían de satisfacer de alguna manera”. En un caso como este, Ruz recuerda que Ley de Enjuiciamiento Criminal prevé la previsión de una fianza.

“No estamos ante una simple adhesión a un procedimiento judicial que ya está en marcha, sino que se trata de ampliar el marco y ámbito tanto subjetivo como objetivo del procedimiento”, determina el juez.

Ruz también señala que Manos Limpias no aporta nuevos datos o alegaciones para que se rebaje la fianza. “La imposición de una fianza proporcionada permite servir de valladar frente a querellas infundadas o impropias que puedan dañar la consideración, imagen o derecho a la presunción de inocencia de los querellados”, concluye.

Ahora, Manos Limpias podrá recurrir en apelación ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional quién tendrá la última palabra sobre la personación del sindicato.

El pasado 20 de febrero, Ruz decidió admitir parcialmente la querella presentada por Manos Limpias contra el Barca por defraudar presuntamente 9 millones de euros a Hacienda en el fichaje de Neymar pero a condición de que abonara una fianza de 45.000 euros.

La Fiscalía, al respecto, era favorable a fijar una fianza de 60.000 euros pero al final el juez decidió rebajarla.

La querella de Manos Limpias, además de contra Rosell, se dirige contra el actual presidente del FC Barcelona, Josep María Bartomeu, contra el vicepresidente económico del club, Javier Faus, y contra el padre del jugador, Neymar Da Silva Santos.

Si Manos Limpias abona la citada fianza, estas personas podrían ser imputadas en el caso.