Según informó la Policía, los hechos se conocieron cuando el autor llevó a arreglar su ordenador. Durante las labores de reparación, los técnicos observaron que su equipo contenía archivos con fotografías de menores practicando sexo con adultos.

Los integrantes del servicio de reparación avisaron a la Policía, que procedió a la detención del dueño del ordenador por tenencia de pornografía infantil. Tras el arresto, los investigadores llevaron a cabo el análisis del material intervenido y encontraron más de 20.000 fotografías y cerca de 500 vídeos de menores de contenido sexual o pornográfico.

Entre los archivos, los agentes comprobaron que varios habían sido elaborados por el propio detenido, unos de contenido explícitamente sexual que están siendo investigados, y otros de fotografías tomadas al descuido en distintas partes de la capital coruñesa.

En estas imágenes, el detenido buscaba a chicas menores de edad y las fotografiaba mientras caminaban por la calle o salían del colegio, algunas de ellas de muy corta edad. También se comprobó que algunas imágenes las retocaba con aplicaciones de tratamiento de la imagen para mejorar de este modo la calidad de las mismas.