Sobre los asistentes, dijo que “hubo una auténtica movilización europea” y destacó que ”no es que viniesen con el bocadillo, es que trajeron pizzas de Nápoles”.

Calificó de “extremismo ideológico” los ataques no sólo al aborto sino también al divorcio y a las uniones de personas del mismo sexo y afirmó que el de ayer fue un “acto claro contra el progreso y los avances de los derechos sociales e individuales”.

Gómez, que hizo estas declaraciones después de la reunión de la Ejcutiva del PSM, pidió a los organizadores que reflexionen sobre el “fracaso en esta movilización de los que intentan colocarse en la antípodas del progreso”.