En el Debate sobre el Estado de la Nación, Rubalcaba replicó con otras cifras a la “batería de titulares” desplegada por Rajoy en su primera intervención. Subrayó que el año arrancó con la destrucción de 184.000 empleos, los sueldos han bajado un 10%, España es el país europeo con mayor desigualdad, uno de cada tres niños vive en riesgo de pobreza, 600.000 alumnos han perdido becas o ayudas, hay copagos sanitarios y restricciones de derechos y libertades.

Frente a una “cierta percepción de España” expuesta por Rajoy, Rubalcaba describió “la vida de los españoles” y le acusó de basar su discurso en tres mentiras: “Que lo peor ha pasado ya, que usted ha hecho lo único que podía hacer y que no le gusta mucho lo que ha hecho estos dos años”.

Alertó de que millones de personas tienen lo peor “por delante”, denunció que el Gobierno ha tenido “otras opciones” pero siempre ha optado por decidir “contra los más débiles”, y en el fondo, utilizando la crisis como coartada, ha hecho “lo que la derecha siempre quiso hacer y ni tan siquiera se atrevió a plantear públicamente”.

Dos años después de llegar el PP al Gobierno, dijo Rubalcaba, se han perdido un millón de empleos, la deuda pública ha crecido 250.000 millones y esa misma cantidad se ha reducido el crédito para familias y pymes.

Denunció que a la reforma laboral que ha restado derechos, a los recortes de becas y de ayudas al empleo, a mermar la atención a la dependencia y a “acabar” con la justicia gratuita “le llama ir por el buen camino”. Pero ha hecho todo eso, sentenció, “porque son ustedes de derechas, porque usted es el líder de la derecha”.

Dejó claro que el PSOE se alegra por las buenas noticias porque “no queremos que España se hunda, no somos el señor Montoro”, pero expuso los “claroscuros” de las cifras de Rajoy, como la falta de crédito, la caída del consumo por la bajada de salarios, o la aparición de contratos “de doce horas por quinientos euros”.

“Mientras gritan alborozados la recuperación”, denunció, siguen tomando medidas como congelar el salario mínimo, y hay millones de personas que solo se habrán recuperado cuando recuperen sus prestaciones y sus derechos.

Rubalcaba subrayó la importancia de la Unión Europea para salir de la crisis y volvió a defender que gran parte de la mejoría en España y en otros países se debe a un giro de la política económica comunitaria que debe ser “más rápido.

Después de que Rajoy anunciara una cotización de 100 euros para nuevos contratos indefinidos, Rubalcaba lo consideró una “rectificación en toda regla” de la reforma laboral a la vista de que en 2013 ha habido 300.000 contratos indefinidos menos que el año anterior.

Alertó de que esa medida es “injusta” porque ahorra más cuanto más alto es el sueldo y puede “no valer para nada” porque la rebaja no dar para contratar indefinido ante la precarización del empleo, y llamó por ello a modificar la propia esencia de la reforma laboral.

IMPUESTOS

Desmintió a Rajoy al sentenciar que sí se pidió rescate “por su desastrosa gestión de Bankia”, y le negó credibilidad para anunciar bajadas de impuestos después de haberlos subido “todos”.

En todo caso, le preguntó a cuánta gente beneficiará la exención del IRPF por ingresos inferiores a 12.000 euros anuales, cuánto costará y si afectará a quienes ganen poco más. Sea como sea, todas esas personas, sentenció, seguirán pagando más impuestos que hace dos años.

Rubalcaba se ofreció a debatir sobre la reforma fiscal con la del PSOE también sobre la mesa, para que paguen impuestos “los que nunca han pagado” y paguen menos “los que siempre han pagado”.

Se refirió también a la reforma del aborto para decirle a Rajoy que la ley de 1985, a la que apela ahora el Gobierno, habría que cambiarla precisamente por el tiempo que ha pasado, y ese es el motivo “por el que usted no la aceptaba y ahora la acepta”, y la pregunta es si las mujeres tendrán que esperar otro tanto para que el PP acepte una ley de plazos.

En ese contexto, pidió expresamente al presidente que renuncie a “extender la moral de la derecha más extrema” al conjunto de los ciudadanos, y que no obligue a los ciudadanos a luchar “por una libertad que ya teníamos alcanzada”.

Denunció también la ley de seguridad ciudadana, una ley “de orden público como Dios manda” con la cual las mesas petitorias en las que el PP pedía firmas contra el Estatuto de Cataluña habrían supuesto una multa de mil euros cada una y que solo se explica con un intento de que la gente “no proteste” por los recortes.

Rubalcaba quiso dejar claro también ante Rajoy que una cosa es la política de Estado de inmigración y otra el análisis “de un suceso dramático que ha costado la vida a quince personas” intentando llegar a Ceuta. Subrayó la “altísima estima” por la Guardia Civil “y de ellos por mí”, y precisamente por ello pidió que se aclare lo sucedido. “Primero la verdad, y luego la responsabilidad”, le dijo.

CORRUPCIÓN

En respuesta a las propuestas de Rajoy contra la corrupción, le alertó de que los ciudadanos están convencidos de que el PP se ha financiado ilegalmente durante veinte años, y afeó “la cacicada mayor” que pretende perpetrar con la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha, al bajar el número de diputados con el único objetivo de “intentar ganar” las elecciones autonómicas. Le pidió que lo retire “por decencia democrática”.

Se refirió también a la tensión con Cataluña para dejar claro que el PSOE “no va a votar a favor del derecho de autodeterminación” pero defiende un diálogo con la mirada puesta en una reforma de la Constitución que reconozca “la verdadera estructura federal del Estado”.

Rubalcaba subrayó la forma “cruel” en la que los españoles han aprendido que los derechos “no son irreversibles” y que las libertades se pueden perder, y concluyó asegurando que el PSOE devolverá esos derechos. El PP, alertó, rechazó el divorcio, el aborto y el matrimonio entre homosexuales, “y perdieron”. “Esta vez será exactamente lo mismo”.